Cossío y el Greco

Anónimo, El entierro del señor de Orgaz (copia del Greco), hacia 1625. Óleo sobre lienzo, Museo Nacional del Prado, Madrid. Anónimo, El entierro del señor de Orgaz (copia del Greco), hacia 1625. Óleo sobre lienzo, Museo Nacional del Prado, Madrid.
Cubierta del primer volumen del libro de Manuel B. Cossío El Greco, Madrid, Victoriano Suárez, 1908. Residencia de Estudiantes, Madrid. Cubierta del primer volumen del libro de Manuel B. Cossío El Greco, Madrid, Victoriano Suárez, 1908. Residencia de Estudiantes, Madrid.

«Las obras de arte nacen del gran fondo subconsciente en que el espíritu se mueve».
«No hay figura de santo que el Greco haya tratado con más amor ni repetido con más insistencia que la de San Francisco».
«El Quijote vino a concluir con los artificiosos y desbarajustados libros de caballería, y a ennoblecer la sencilla humorística narración de costumbres; el Entierro fue la precursora y más clara protesta contra las falsas y pomposas composiciones manieristas; y a Velázquez le vino del Greco el perpetuo desdén contra todo género de artificios».
El entierro del conde de Orgaz: «asimilación por el Greco de una mística a la vez naturalista y ascética».
Manuel B. Cossío

La primera gran monografía sobre el pintor de Toledo fue la publicada por Manuel B. Cossío en 1908. Se trata de una obra fundamental, sin la cual no puede entenderse el largo proceso a través del cual el Greco ha llegado a ser una figura imprescindible, tanto en el arte europeo de su tiempo como en el canon de la pintura occidental.

En su libro, Cossío ofrece un recorrido cronológico por los acontecimientos más significativos de la vida del pintor, hace una propuesta de clasificación de su obra atendiendo a sus diferentes estilos, emite un juicio crítico sobre el valor de su trabajo como artista, recopila e interpreta todo lo publicado hasta entonces, traza un primer esquema de la evolución estilística del pintor y realiza el primer catálogo razonado de sus obras, que incluye casi quinientas. Además, aporta datos nuevos procedentes de consultas de archivo sobre un importante número de cuadros y conjuntos de obras del pintor, de lo que es un buen ejemplo el óleo Orden de la Camáldula, referenciado por primera vez en su monografía.

Gracias al significativo trabajo realizado por Cossío, El Greco fue durante décadas, y a través de sus numerosas reediciones, la principal obra de referencia sobre el pintor de Toledo.